Museo de Antropología e Historia
Colecciones Henriqueta Peñalver

Se funda en una casa colonial que perteneció a un realista de apellido Ibarrolaburu. Se construyó en 1766 por: el Capitán Don Félix Páez y Doña Juliana López y la hereda su hija Doña Josefa Páez, casada con Don Ramón Ibarrolaburu y Añorga, coronel de Caballería del Rey.

Durante el periodo de la guerra de independencia, la familia Ibarrolaburu abandona la casa y es transformada en hospital militar; finalizada la Batalla de Carabobo, se velan en ella, los restos de los próceres Manuel Cedeño y Ambrosio Plaza.

​

Esa noche el Libertador acompañó a sus jefes y soldados muertos.

Se entrega la casa en pago, por haberes militares, al Prócer José María Briceño. La hereda su esposa, Josefa Santander de Briceño (hermana del General Francisco de Paula Santander). Esta la vende en 1837 a los esposos, Pulido Méndez, quienes dos años después (11 de mayo de 1839) la venden a el coronel Pedro Celis y su esposa María Isabel Plaza, hermana del prócer. El coronel Celis refaccionó la casa dividiéndola en dos naves que circunda a los dos patios principales, mejorándola con detalles neo clásicos.

​

Desde entonces, la familia Celis se establece, participando en actividades artísticas y educativas en esta importante ciudad hasta que, en 1955, sus herederos la venden a la nación. Allí permanece olvidada y se van deteriorando sus techos y tapias hasta que, una vez establecida la democracia, se le designa como Monumento Histórico de la Nación en 1960.

La antropóloga Henriqueta Peñalver y varios notables de la ciudad logran interesar al nuevo gobierno constitucional en la necesidad urgente de su restauración. La culminación de la obra coincide con el Sesquicentenario de la Batalla de Carabobo y entonces la dan en comodato de 50 años al Museo de Antropología, Arte e Historia de Valencia, dirigido por la Arqueóloga Heriqueta Peñalver, exhibiendo la colección antropológica y paleontológica excavada en los alrededores del Lago de Valencia, obra ejecutada con recursos del estado y coordinada por la mencionada Arqueóloga, quien menciona en unos de sus cuadernos de trabajo, que la edificación no es la apropiada para tal fin.